Los ingresos tributarios totales de la provincia fueron de $ 82.157 millones, lo que implicó una variación nominal de 37,1% interanual y de -2,5% en términos reales.
Los ingresos tributarios de la provincia de Buenos Aires desaceleraron su caída en términos reales durante agosto, con lo cual se morigeró la trayectoria negativa de los últimos meses, resaltó un informe de la gerencia de Estudios Económicos y Sociales del banco público bonaerense.
El análisis precisó que el mes pasado los ingresos tributarios totales de la provincia fueron de $ 82.157 millones, lo que implicó una variación nominal de 37,1% interanual y de -2,5% en términos reales.
Según el informe, ese repunte reflejó “una contribución relevante de las transferencias nacionales recibidas por la provincia”, que registró un crecimiento nominal de 48,6% y un incremento real interanual de 5,7%.
La recaudación de origen provincial, en tanto, se mantuvo en terreno negativo en términos reales: en agosto se registró un magro crecimiento nominal de 26,1% frente a un año atrás, hasta $ 38.827 millones, lo que implicó una baja real de 10,2%.
“El despliegue de la pandemia de Covid-19 se conjugó con la crisis preexistente, agudizando el declive de la actividad económica y la caída en la cobrabilidad tributaria”, explicó el informe.
De modo simultáneo, remarcó, el abordaje de la crisis por parte del Gobierno provincial fue “contra cíclico”, ya que se ejecutaron diversas medidas de flexibilización tributaria, destacadas en el Programa de Asistencia de Emergencia desarrollado por ARBA (la Agencia de Recaudación) “con el fin de aliviar la situación de las empresas y de los contribuyentes provinciales”.
La gerencia del Banco Provincia destacó además que “debido a la sanción tardía de la ley impositiva 2020, como a las prórrogas de vencimientos a causa de la emergencia económica, el calendario de vencimientos de impuestos de índole patrimonial resultó modificado respecto del año anterior”.
En ese marco, los gravámenes vinculados con la actividad provincial (como Ingresos Brutos y Sellos) sostuvieron la recaudación.
Lo recaudado por IB representó el 77,6% de total percibido, y arrojó una suba nominal de 29,7% interanual en agosto (-7,7% en términos reales).
Esa variación implicó “una mejora de 11,7 puntos porcentuales con respecto al piso registrado en mayo pasado, cuando el efecto de la Covid-19 se mostró con mayor énfasis”, si bien la baja fue de 4,9 puntos respecto de julio, “debido a las medidas de alivio fiscal que sobre este impuesto activó el Gobierno provincial frente a la emergencia sanitaria”.
En lo que respecta a Sellos, se observó una suba de 34,3% interanual en términos nominales (-4,4% real) ante la reapertura de los Registros del Automotor, que permitió recuperar operaciones de transferencias y patentamiento de vehículos.
Influyó también en este caso el impulso que otorga el régimen de compras mediante tarjetas de crédito, fortalecido como medio de pago en el marco de las medidas de aislamiento social, concluyó el informe.